Todo sobre la resolución de conflictos laborales

En un lugar de trabajo conviven muchas personalidades distintas y es habitual que haya desavenencias. Identificar los conflictos laborales y saber cómo resolverlos es clave para garantizar un buen clima laboral y fomentar el espíritu de equipo, que permitan a los empleados llevar a cabo sus tareas en el ambiente adecuado.

Hay muchos tipos de conflictos laborales que todo empresario quiere evitar. Te contamos cuáles son, los ejemplos más comunes y cómo puedes manejar y resolverlos si te encuentras con ellos. ¡Sigue leyendo!

¿Qué son los conflictos laborales?

Los conflictos laborales son problemas que surgen en el ámbito de trabajo y que involucran a dos o más trabajadores de la misma empresa. Puede haber muchas causas, ya sean rivalidades, conflicto de intereses, diferencias de opiniones o desavenencias en las relaciones interpersonales entre empleados. Este tipo de conflictos se dan entre compañeros de trabajo, entre un trabajador y la dirección, o entre miembros de la propia dirección de la empresa. 

Poder anticiparse a los conflictos laborales es esencial para garantizar el buen funcionamiento de la empresa y las dinámicas de trabajo. Un problema mal llevado puede afectar a la productividad, al ambiente de trabajo y ocasionar bajas en el equipo, afectando de forma negativa al desarrollo de la actividad.

Tipos de conflictos laborales y sus causas

Para poder actuar ante los distintos conflictos en el trabajo es muy importante saber qué tipos existen y poder identificarlos.

Conflictos según las personas implicadas

• Interpersonales: un conflicto entre dos personas de la empresa.
• Intrapersonales: el problema afecta a una sola persona y a su relación con el resto del grupo o la empresa.
• Intergrupales: en este caso hay tres o más personas involucradas.
• Intragrupales: el conflicto afecta a varios grupos dentro de la empresa que están enfrentados.
• Organizacionales: estos abarcan a la totalidad de la empresa y suelen ser los más graves y difíciles de resolver.

Conflictos según su causa

• Mala comunicación: los malentendidos son una causa muy habitual de los conflictos laborales, y suelen darse por falta de información.
• De relación: a menudo se producen desavenencias entre las personas por incompatibilidad de caracteres. Es uno de los tipos de conflictos laborales más comunes.
• De intereses: los intereses del empleado chocan con los del grupo o la empresa.
• De valores: los valores de uno o varios empleados no se alinean con los de la empresa, la dirección u otros trabajadores.

Conflictos según su naturaleza

• Contingentes: estos son problemas puntuales y habituales que se pueden resolver con facilidad si se presentan las soluciones adecuadas.
• Estructurales: se trata de conflictos sistémicos que afectan a la empresa profundamente. Son de los más difíciles de abordar y solucionar. 
• Desplazados: estos son conflictos ocultos, que se esconden bajo problemas de mayor calibre y, por lo tanto, no se actúa ante ellos.
• Mal atribuidos: en este caso las partes no son conscientes de que existe un conflicto. Para abordarlos se debe empezar por reconociendo la existencia de un problema.

Ejemplos de conflictos laborales

Ahora que conoces los tipos de conflictos laborales, te presentamos algunos de los ejemplos más habituales de estos problemas.

Desavenencias entre compañeros: En estos casos los empleados no logran entenderse y trabajar en armonía. Son conflictos habituales a causa de diferencias de personalidad, envidias o rivalidad.

Falta de reconocimiento: Si un empleado no recibe los incentivos suficientes por el trabajo realizado correctamente, se pueden producir conflictos entre este y la empresa, e incluso terminar con su marcha a la competencia.

Malentendidos: Estas situaciones pueden darse entre compañeros de equipo y departamento o entre jefes y empleados. Es muy importante que en el ámbito laboral haya un buen líder  que sepa comunicar la información de manera efectiva.

Estrés y exceso de trabajo: Cuando los trabajadores sienten que trabajan más de lo que exige su contrato, sin retribución, esto genera un mal ambiente. El estrés puede provocar problemas de salud como la ansiedad y generar bajas.

Acoso laboral: Cuando uno de varios miembros de la empresa, de cualquier rango, provocan miedo e inseguridad a un empleado mediante acciones hostigadoras que le afectan de manera psicológica.

Desigualdad y discriminación: El racismo, las desigualdades de género o la discriminación por opiniones, religión o valores distintos son uno de los problemas más graves que pueden suceder en el ambiente laboral.

Incertidumbre laboral: Los recortes de personal o sueldo, los problemas organizacionales y la rotación de empleados puede provocar una sensación de inseguridad en los trabajadores, terminando en renuncias.

Claves para la resolución de conflictos laborales

Hay diversas técnicas y métodos para la prevención y la solución de los conflictos laborales más comunes. Los pasos más habituales son:

1. Identificar el conflicto a tratar
2. Identificar a las partes
3. Analizar la situación
4. Entrevistar a las partes para buscar una solución
5. Definir una acción para resolverlo

En general, es recomendable que las empresas trabajen la prevención de los conflictos laborales y cuenten con un plan de actuación para abordarlos. Aunque algunos problemas son inevitables y responden a la naturaleza humana, en la mayoría de los casos está en las manos de la empresa trabajar para evitarlos. 

Acciones como el team building, el correcto onboarding, la transparencia en la comunicación, la elección de un buen líder, el uso de la empatía, la implementación de políticas de igualdad y el uso del salario emocional con algunas de las recomendaciones para prevenir conflictos laborales.

Como ves, una correcta gestión de conflictos laborales es esencial para conseguir con éxito todos los objetivos de la empresa. Para ello también será imprescindible contar con profesionales cualificados que aporten valor a la empresa. En Turijobs contamos con una bolsa de profesionales del turismo y la hostelería. 

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