Cómo tener éxito en una entrevista semiestructurada

Conseguir un trabajo nuevo es una tarea que requiere de cierta preparación, ya que implica la combinación de una serie de factores. La mejor estrategia para poder tener más posibilidades de conseguir ese puesto laboral que tanto te gusta es prepararte lo mejor posible. Sin embargo no estamos hablando de la experiencia o los conocimientos teóricos sino de un proceso que determinará si acabarás trabajando en la empresa que deseas: la entrevista de trabajo.

Una vez que has pasado el primer paso para lograr el trabajo, la selección de tu curriculum vitae, llega el momento de enfrentarte a uno o varios entrevistadores que pondrán a prueba tus conocimientos y experiencia para determinar si eres el candidato más adecuado para ese puesto de trabajo. Dependiendo del trabajo a realizar, las empresas pueden utilizar una u otra técnica para realizar sus entrevistas de trabajo. Una de ellas es la entrevista semiestructurada o mixta. ¿Sabes cómo funciona?

¿En qué consiste la entrevista mixta o semiestructurada?

Una entrevista semiestructurada es un tipo de entrevista en el que el entrevistador tiene un esquema fijo de preguntas para todos los candidatos pero también hay ciertas preguntas específicas que se realizan únicamente a uno o varios candidatos; es decir, todas las personas tendrán que responder unas preguntas comunes pero hay unas preguntas específicas para cada candidato según su perfil. Es posible que estas últimas preguntas no estén preparadas y surjan durante la entrevista de manera espontánea.

En este tipo de entrevista el entrevistador tiene una mayor libertad para ajustarse a las características de la persona que busca trabajo ya que le puede hacer preguntas que inicialmente no estaban preparadas pero que durante el transcurso de la entrevista son necesarias para recopilar más información relevante sobre las habilidades y aptitudes del entrevistado. Aunque cada compañía tiene libertad absoluta para decidir usar este tipo de entrevista, lo cierto es que cuanto más pequeñas son las empresas, más posibilidades tienes de que te enfrentes a una entrevista semiestructurada.

¿Qué aporta una entrevista mixta o semiestructurada?

Una entrevista semiestructurada es muy útil para que el entrevistador pueda determinar, con mayor acierto, si la persona que piensa contratar podrá desarrollar correctamente su trabajo y aportar otras ventajas a la empresa.

Gracias a las preguntas planificadas, el encargado de encabezar la conversación sabrá, no solo los conocimientos o experiencia del futuro trabajador, sino también si es serio, responsable, sociable, si tiene dotes de liderazgo y otros datos de interés profesional. Hoy en día, para las empresas no sólo son importantes los conocimientos y experiencia de sus empleados, también lo son la capacidad de aprendizaje, la sociabilidad, los estilos de vida saludables y los buenos modales, entre otros. Las compañías saben que el mayor rendimiento se obtiene cuando hay un buen ambiente. Por lo tanto, es posible que el entrevistador añada preguntas espontáneas entre las estrictamente profesionales.

Hay que tener en cuenta en una entrevista semiestructurada es que este tipo de entrevista no es mejor ni peor que cualquier otra entrevista, simplemente es la opción que decide seguir el entrevistador o el equipo de recursos humanos para seleccionar a su personal ya que considera que es el mejor método según la filosofía de la empresa.

El tipo de preguntas en una entrevista semiestructurada

El tipo de preguntas que se hacen en una entrevista mixta o semiestructurada son las que te encontrarías en una conversación normal con cualquier persona. Es decir, fluirán de manera natural a medida que el entrevistado vaya dando sus respuestas. Aunque puedan parecer preguntas sin relevancia, servirán para conocer mucho mejor al futuro trabajador. No obstante, estas preguntas deben tener unos límites para no vulnerar la privacidad del entrevistado.

Algunas de las preguntas que pueden surgir tendrán que ver con los hobbies, la familia, los gustos a la hora de viajar, la vivienda y otros gustos y hábitos personales que podrías compartir con cualquier otra persona.

Por ejemplo, puede que la empresa quiera empleados con hábitos saludables, así que puede incluir la pregunta “¿haces algún deporte?”. Si la respuesta es afirmativa, es posible que el entrevistador quiera saber el tipo de deporte y la dedicación, tal vez con la intención de determinar si lo empleas como forma de mantener una buena salud o si el nivel de implicación te robará demasiado tiempo o fuerza como para desarrollar una función específica dentro de la compañía.

¿Cómo preparar una entrevista mixta?

El entrevistador tendrá muy claro el objetivo y utilizará preguntas bien pensadas y formuladas. Aunque este tipo de entrevistas no ha de tener planteadas todas las interrogantes, sí se puede hacer un esquema y pensar en las posibilidades que puedan surgir.

Algunas preguntas que se pueden hacer son las siguientes:

Pregunta principal: ¿Cuál fue el motivo de su última rescisión de trabajo?

• ¿Cree sinceramente que podrá desarrollar el puesto de trabajo requerido?
• Si un responsable le expone algo con lo que no esté de acuerdo ¿cómo tratará el asunto?
• Si hay una necesidad puntual que requiera un esfuerzo adicional ¿está dispuesto a cooperar hasta un grado razonable?

Consejo: Preguntas como estas desvelarán la actitud del candidato ante el trabajo y sus reacciones cuando surjan conflictos. Percibirás si el trabajo a desarrollar le abruma, si resuelve los conflictos de manera razonable y pacífica o si está dispuesto a hacer esfuerzos por la empresa.

Pregunta principal:  ¿Tiene familia?

• ¿Dónde disfrutan más de sus actividades en familia?
• ¿Les gusta más ir de vacaciones a la playa o a zonas de montaña?
• ¿Trabaja su pareja?

Consejo: Estas interrogantes te ayudarán a conocer si es una persona familiar y responsable. Es de esperar que los progenitores dediquen tiempo a su familia. Una mala relación familiar puede afectar negativamente al rendimiento laboral.

Pregunta principal: ¿Cuáles son sus metas laborales?

• ¿Está estudiando algo relacionado con este puesto de trabajo?
• ¿Tiene experiencia en más campos de los descritos en el currículum?
• ¿Tiene previsto cursar algún otro estudio?

Consejo: Estas preguntas te ayudarán a ver si el posible empleado aportará más beneficios a la empresa y si es una persona con inquietudes y ganas de mejorar. También servirá para conocer si su sitio en el futuro seguirá siendo tu empresa.

¿Cómo responder en una entrevista semiestructurada?

Uno tal vez llegue a la conclusión errónea de que lo mejor es improvisar a la hora de contestar a estas respuestas, pero no es cierto. Una preparación de la entrevista permitirá que tengas la presencia adecuada y que respondas de forma correcta, con sinceridad, pero sin divagar.

Para que llegues bien preparado a tu entrevista hemos preparado un pequeño guión de todo lo que tienes que tener en cuenta antes, durante y después de la entrevista.

1. Antes de la entrevista semiestructurada

• No te olvides de llevar contigo todos los documentos personales que pueden ayudarte a ser seleccionado. Aunque el entrevistador ya tiene tu CV, lleva más copias junto a cartas de referencia u otros documentos que te ayuden a sobresalir por encima del resto de candidatos. Quizás no tengas que utilizar esta documentación, pero es mejor estar preparado.
• Elige un vestuario acorde al tipo de trabajo y la filosofía de la empresa; por ejemplo, si te vas a presentar para un puesto directivo, usa el sentido común y viste siempre de manera formal, profesional y elegante.
• Recopila toda la información que puedas de la empresa. En este sentido internet es un gran aliado, por lo que revisa la página web y las redes sociales de la compañía para conocer más datos sobre ella.
• Nunca llegues tarde. Esto da una mala impresión y no es la mejor manera de empezar una entrevista.

2. Durante la entrevista semiestructurada

• No pienses si una pregunta es específica para ti o es de carácter general para todos los candidatos, simplemente respóndela lo mejor que puedas basándote en tus conocimientos y experiencia.
• No digas lo primero que te venga a la cabeza, piensa por unos dos o tres segundos. Si no te das este tiempo, tal vez contestes algo impreciso o poco realista sobre ti mismo.
• Cuida tu lenguaje corporal, en una entrevista semiestructurada la psicología es muy importante y el entrevistador tomará buena nota de todos tus comportamientos verbales y no verbales para darles una interpretación adecuada.
• Usa un lenguaje formal y profesional para que el entrevistador sepa que sabes de lo que estás hablando. Únicamente usa un lenguaje coloquial si el entrevistador te da pie a ello y nunca utilices palabras obscenas.

3. Después de la entrevista semiestructurada

• Lo ideal es que al día siguiente de tu entrevista mandes un correo electrónico al entrevistador agradeciéndole su tiempo y poniéndote a su disposición por si necesita algo más. No llames por teléfono ya que podría ser muy invasivo y tampoco te extiendas mucho. Es muy importante que seas breve porque el entrevistador ya tiene todo la información que necesita sobre ti y esta carta es simplemente una formalidad que demuestra tu educación.

Consejos a tener en cuenta en una entrevista mixta

Te compartimos algunos consejos para que tengas más confianza en ti mismo durante la entrevista y sobresalgas positivamente por encima del resto de candidatos:

• Si la entrevista no va a ser presencial sino por videoconferencia, asegúrate que tu dispositivo y conexión a internet funcionan perfectamente.
• Usa los servicios y/o productos de la compañía para conocerla mejor.
• Practica preguntas típicas de entrevistas y presta atención a tu entonación y velocidad al hablar.
• Pide que alguien te asesore antes de presentarte a la entrevista.
• No interrumpas al entrevistador y trata de ceñirte a lo que te preguntan.
• Si tienes cualquier duda, pregúntale al entrevistador al final de la entrevista antes de marcharte.
• Y lo más importante de todo: confía en tus propias posibilidades.

Reflexiones ante una entrevista semiestructurada

Si eres el entrevistado, recuerda que si te han concedido una entrevista es porque ya eres interesante para la empresa. Ahora, las respuestas a las preguntas secundarias marcarán la diferencia frente a otros candidatos.

Si eres el entrevistador, piensa que el éxito de la contratación es tu apuesta personal. Las preguntas bien guiadas te ayudarán a diferenciar entre el empleado que se limitará a desarrollar su trabajo y el que aportará otros beneficios a la compañía.